TrailersBooks Revelaciones Los amantes espirituales
3 Minutos
antes….
Le explicaba a él, la felicidad que
había sentido la ver a mi sobrina nacer, esa sensación de alegría de mi hermano
me daba mucha felicidad y le preguntaba si algún día nosotros sentiríamos eso.
Él asintió con sonrisa sin apartar su mirada de la carretera y a pesar de eso
fue solo unos segundos, el sentir el fuerte golpe en todo mi cuerpo.
Actualidad…
Caminaba aun perdida en mi mente y
cuerpo, no pensaba o mejor dicho si lo hacía ¿pero en qué?, me sentía tan
extraña y rara pero bien, muy bien, feliz, dentro de todo me sentía feliz
mientras seguía caminando por….¿por dónde lo hacía?, debajo de mi no había
nada, arriba tampoco, ni a izquierda ni derecha. Poco después vi una pequeña
puerta, en la cual entre y ahí me vi en una especie de habitación blanca, pero
seguía sola y pensé en él, en el hombre que me había dado desde siempre de mi
existencia felicidad, el hombre al que amaba y el hombre que me amaba.
Y ahí lo vi, me sentía tan bien de
verlo llegar a mí, me sentía tan feliz de poder encontrármelo, y no podía dejar
de sentir que ya no estaba realmente en el mundo de los vivos, había
desaparecido de ese mundo que tanta crueldad me había aportado a mi vida, a mi
espíritu, porque en comparación a lo maravilloso del sentimiento que estaba
viviendo en estos momentos era inigualable la felicidad, y la sonrisa de él que
me la estaba regalando en esos instantes se me transformaba diez veces mejor,
en ese momento mi sonrisa también salió para él. Aun lejos, no podíamos
tocarnos y nada de eso tenía nada que ver porque su caminar hacia mí me
proporcionaba sensaciones hermosas, lindas, y jamás quería perder ese
sentimiento de bienestar, entonces sin hablar, no hacía falta palabras, le agradecí
a Dios por toda esa bendición que me estaba proporcionando.
Y de nuevo todo cambio, una luz
llegaba, entraba detrás de él absorbiéndolo rápidamente, se lo llevaron, me lo
arrebataron sin piedad, y mis sentimientos cambiaron de golpe, no sé si tenía
corazón o no en esos momentos pero si emociones fuertes y grandes y se me hicieron
trizas, me inundo la amargura, el desespero, me sentí morir de dolor las
sensaciones me llevaron a un profundo desespero de malas vibraciones, a pesar
de estar en ese bello lugar mis sentimientos malos se apoderaron de mi
potenciándose cien veces más, rencor, culpa, desconsuelo, dolor, miedo, odio,
amargura, sufrimiento y más dolor mucho dolor. Sabía que él se había ido para
siempre y que yo me había quedado ahí y lo había perdido. Su regreso al mundo
de los vivos me dejo en desgracia eterna y entonces me llego una pregunta a mis
sensaciones encontradas en ese instante:
“Si yo había comprobado que existe el
maravilloso cielo, que me daba lo mejor de todo mi ser, ¿también podía darme lo
peor de todo mi ser?”
Moraleja:
No importa donde estemos si en el
infierno o en el cielo, si en la tierra o mas allá, los sentimientos buenos o
malos se potenciaran al otro lado. Procuren llegar con lo mejor que tengan
ustedes dentro de todo su ser….
DIOS OS BENDIGA SIEMPRE